De los creadores de Mi padre no sabe ni minimizar una pestaña del Internet Explorer pero se maneja mejor que yo en el Autocad llega: Mi madre tiene problemas para encender el ordenador pero ha aprendido a usar OneDrive de maravilla. Padres y madres... ¿ustedes lo entienden? Porque yo no; es decir, mis padres son las personas más pesadas del mundo porque a la mínima que no saben usar algo en cualquier ordenador, ya sea un portátil o un sobremesa, me piden ayuda a mí; y eso no me importaría en absoluto si no fuera porque se olvidan de lo que les he explicado al día siguiente.

Sin embargo, lo del Autocad es totalmente cierto: mi padre, que tiene nociones de arquitectura, aprendió a usarlo y lo conoce de maravilla, cuando yo no tengo ni idea; sin embargo, me necesita para las cosas más básicas. Y mi madre igual: ella suele requerir mis servicios a la hora de descargar música de artistas que a mí me parecen horribles o descargar vídeos de esos mismos artistas que me parecen horribles. Lo gracioso fue que le enseñé a usar OneDrive y... ¡Sorpresa!, no necesitó que se lo explicase dos veces: está todo el día dándole al servicio en cuestión.

Porque se trata de un servicio, y muy útil, por cierto, que te permite guardar archivos de forma externa al disco duro del ordenador; algo que es muy necesario en una época en la que es facilísimo conseguir cosas a través de internet. Mi madre tenía en su portátil mini un porrón de canciones y vídeos, los que yo le había bajado, y empezaba a quedarse sin espacio; y ahora, es perfectamente capaz de guardarlas todas sin mi ayuda. Ojalá siempre fuesen así de aplicados, en serio; porque si algo no tengo yo, es paciencia. No sé cómo he resistido tanto.